100 años del fallecimiento de Charles Adam (primer presidente del Recreativo) y 100 años del fin del doctor Mackay al frente del Club
Se cumple un siglo de dos efemérides importantes en la historia del Real Club Recreativo de Huelva: la muerte del que fuera primer presidente del Decano, Charles Wilson Adam, y el final de la larga etapa de William Alexander Mackay al frente del Club.
Charles Wilson Adam y William Alexander Mackay llegaron a Huelva en 1879 y 1882, respectivamente. Ambos eran escoceses, el primero había nacido en Paisley, localidad
cercana a Glasgow, y el segundo en Lybster, pequeña población costera en el norte de las Highlands. Ambos eran buenos deportistas y desarrollarían en Huelva toda su labor
profesional.
Adam vino a nuestra ciudad contratado como ingeniero para dirigir la Fábrica de Gas que la Huelva Gas Company estaba construyendo al final de la Merced, como empresa
concesionaria del servicio de iluminación a gas de las calles de Huelva. Llegó a finales de 1879, recién casado, y aquí nacieron sus seis hijos, dos de los cuales están enterrados en el cementerio británico onubense.
Durante la década de 1880, numerosos partidos de fútbol y cricket se jugaron en unos terrenos cedidos por el ayuntamiento a la fábrica de gas de Adam, situados justo
enfrente de ella (delante de la actual plaza de toros de La Merced).
Por su parte, William Alexander Mackay, días después de graduarse en Medicina y Cirugía en la Universidad de Edimburgo, en junio de 1882, fue reclamado por su
hermano mayor, John, que era por entonces el responsable médico de la Rio Tinto Company, para que viniera a ayudarle, y fue contratado al año siguiente como médico
de dicha compañía minera para atender al personal que trabajaba en Huelva capital.
Aquí residió el resto de su vida, hasta meses antes de su fallecimiento en 1927, y aquí ejerció como reputado cirujano tanto en el hospital de la compañía, como en su clínica
particular, que adquirió gran fama incluso fuera de Huelva.
Desde el primer momento se forjó entre ellos una gran amistad, al residir ambos lejos de su tierra común y dadas sus afinidades deportivas. El doctor Mackay era el encargado de concertar los partidos y de reclutar a las tripulaciones británicas de barcos anclados en el puerto, o de convocar a los que residían en Minas de Riotinto, para enfrentarse a los empleados de la compañía que residían en Huelva. Solía actuar de árbitro, según contaban algunos pioneros, y con el tiempo se fueron incorporando jóvenes onubenses a aquellos primeros equipos.
Tras unos años de consolidación de estas prácticas deportivas, deciden dar un paso más, y se funda oficialmente, el 18 de diciembre de 1889, el club Recreativo de Huelva, con Charles Adam de presidente y William Alexander Mackay como vocal encargado de la organización de los partidos.
Ambos escoceses residieron durante algunos años uno enfrente del otro, en la calle La Fuente de nuestra capital, e incluso el doctor Mackay fue el padrino de uno de los hijos de Charles Adam, Jack, que entre 1910 y 1915 fue un destacado delantero del Recre. Tras la renuncia de Adam, a principios de 1896, la presidencia del Club pasa a ser
ocupada por el doctor Mackay, que va a continuar en el cargo hasta que el 10 de septiembre de 1924, hace hoy 100 años, se elija la primera directiva sin su presencia.
Hay que resaltar, además de su dilatada trayectoria al frente del Decano (35 años de directivo y 28 como presidente), que bajo el mandato de William Alexander Mackay el
Club se convirtió en el referente que estimuló la fundación de clubes en otras ciudades vecinas, se creó la estructura de los equipos de cantera (la primera de España), se
organizaron competiciones como la Copa Seamen’s o el Campeonato de Andalucía y Extremadura, se participó tanto en los Campeonatos de España, celebrados inicialmente
en Madrid, como en las reuniones, también en la capital de España, para la fundación de la Federación Española de Fútbol, y se obtuvo de Alfonso XIII el título de Real para la
entidad.
Durante todos esos años, el Club, como todos lo conocían, fue estrictamente amateur, ningún futbolista cobraba, y solo podían jugar los socios que estuvieran al corriente de
pago.
El 3 de septiembre de 1924 fallecía Charles Adam en Loughborough (Inglaterra). Pero la noticia no se conoció en Huelva hasta unos días después, el 8 de septiembre,
festividad de la patrona, la Virgen de la Cinta. Su gran amigo, el doctor Mackay, sin duda, quedaría afectado por la noticia.
No sabemos si este luctuoso hecho tuvo influencia en la decisión tomada solo dos días después. Los estatutos del Club establecían que anualmente los socios debían elegir
nueva directiva, aunque el doctor Mackay había sido siempre reelegido, año tras año, para la presidencia, debido a su enorme prestigio. Entendemos que en este momento fue él quien decidió dejar paso a otras personas más jóvenes. Lo cierto es que, en la reunión de aquel 10 de septiembre de 1924, los socios del Club Decano eligieron una directiva que ya no iba a estar presidida por el doctor Mackay. También dejaron la directiva, tras muchos años de formar parte de ella, el irlandés William Alcock y el médico
escocés Ian Macdonald, sobrino del doctor Mackay. El nuevo presidente elegido era ya onubense, el exjugador José Ochoa de Mora.
Era el fin de una era para la entidad pionera del fútbol español, durante la cual había estado tutelada por los pioneros británicos, en la que había difundido los valores
originales de la práctica del sport en nuestro país, y en la que el Club había ostentado la primacía en el ámbito andaluz.
Hace justo ahora 100 años el Recreativo emprendía una nueva etapa, que le llevaría a aceptar el profesionalismo, e ir ocupando un lugar más modesto que hasta entonces en
el contexto de las competiciones nacionales, como en el campeonato de Liga que la Federación Española crearía cuatro años después.